La especialidad médico internista es un objetivo que muchos de los estudiantes de esta profesión aspiran alcanzar en algún momento de su carrera académica: trascender la formación básica y aplicarse en un campo concreto para cumplir con la meta inicial que despertó la vocación inicial de ayudar a las personas a curar su enfermedad. En el Instituto Mortaji somos conscientes de que la formación de profesionales de calidad, y con sentido ético, es la mejor aportación que se le puede hacer a la sociedad y es el mejor ejemplo de nuestra experiencia en la medicina y, propiamente, en la medicina interna.

¿Que es el médico internista?

Pero, ¿que es un médico internista?, ¿a qué se dedica?, ¿en qué se diferencia el médico internista de los demás profesionales? Básicamente el médico internista es aquel que, entre los especialistas, tiene un conocimiento más completo e integral del cuerpo humano. Se dedica a la prevención y el tratamiento no quirúrgico de las enfermedades que afectan los órganos y los sistemas internos de la población adulta; se trata de una de las ramas de la medicina que mayor dedicación y estudio requiere. El médico internista, en otras palabras, asume una gran responsabilidad, ya que debe tener un conocimiento suficiente acerca de la totalidad del cuerpo humano y, asimismo, tiene que consagrarse al saber a término indefinido, pues los saberes científicos de esta especialidad evolucionan y avanzan a paso de gigante y de manera constante.

Habrá quien diga -aplicando el sentido común- ¿pero esto mismo no es lo que hacen los médicos generales comunes y corrientes? Desde cierta óptica, sí; mas los conocimientos del médico internista superan con creces los del médico promedio, debido a que este está en la capacidad de diagnosticar enfermedades con un mayor grado de precisión y agudeza, y porque este tiene el juicio para dictar un tratamiento clínico considerando cada una de las particularidades del paciente y su historia clínica. Cabe añadir que el médico internista se diferencia del médico cirujano (otro de los especialistas que más autoridad tiene en el mundo de la profesión) en que el primero procura a toda costa evitar la intervención quirúrgica del paciente.